Fūryū
La belleza no llama, solo pasa, como una rama que cae. La elegancia del frío, del viento, de lo que se desvanece sin hacer ruido. Fūryū: aquello que es bello porque no dura.
Descripción artística:
Fūryū se abre como un paisaje de ramas y nieve, sin horizonte claro, donde todo es movimiento congelado. Las texturas blancas y dinámicas recuerdan la nieve atrapada entre troncos y rocas, mientras que el fondo de tonos terrosos y fríos sugiere un silencio denso, invernal.
La composición se funde entre lo visible y lo intuido, y invita a una lectura estética propia del wabi-sabi: belleza en la imperfección, en el gesto espontáneo y en la materia que no pretende nada. Fūryū es una reverencia a la naturaleza cuando deja de querer ser observada.
Fūryū (風流) es un concepto estético japonés que se refiere a una elegancia refinada, a menudo asociada con la simplicidad, la naturaleza y la apreciación del momento presente.